Carvalho Vol. 6: Viajero

La trama de "Viajero" la vemos iniciada cuando Carvalho es contratado por una familia estadounidense, los Harding, cuyo hijo, un joven activista político, desaparece misteriosamente en medio de la efervescencia política de Argentina en 1983.

La desaparición del joven, Daniel Harding, coincide con un periodo de gran tensión política en el país, marcado por la dictadura militar y la creciente influencia de grupos guerrilleros.

Inicialmente, la investigación se centra en la posibilidad de que Daniel haya sido secuestrado por la guerrilla, pero a medida que Carvalho profundiza en la investigación, descubre una red de corrupción que involucra a políticos, empresarios y miembros de la policía. La investigación lo lleva a Buenos Aires, donde Carvalho se enfrenta a una ciudad dividida entre la esperanza y el desasosiego.

La atmósfera es densa, opresiva, y se siente la tensión palpable en cada calle, en cada conversación.

El detective se ve envuelto en un laberinto de informantes, pistas falsas y peligrosos encuentros.

Carvalho, al igual que en otras novelas, se vale de su ingenio, su astucia y su habilidad para conectar con las personas, aunque a veces la soledad de su profesión lo arrastra hacia la desesperación.

La complejidad de la trama se intensifica a medida que Carvalho descubre que la desaparición de Daniel no es simplemente un caso de secuestro político, sino que está intrínsecamente ligado a un esquema de corrupción que alcanza las más altas esferas del poder. La investigación de Carvalho se convierte en una carrera contra el tiempo, ya que el joven Daniel, al ser descubierto como un posible implicado en la corrupción, es encarcelado y se encuentra en grave peligro.

Carvalho, ahora con la ayuda de una joven periodista, Elena Rodríguez, se dedica a desentrañar la red de complicidades y a descubrir la verdad sobre lo que realmente sucedió con Daniel.

A medida que avanzan, se revela un oscuro secreto: la desaparición de Daniel está relacionada con un proyecto de desarrollo urbano que está causando un enorme daño al medio ambiente y a las comunidades locales.

Este proyecto, impulsado por una poderosa empresa multinacional, está siendo utilizado para financiar a grupos paramilitares y para silenciar a los opositores. La novela se convierte en una crítica feroz al capitalismo desenfrenado y a la corrupción política, mostrando cómo las ambiciones personales y los intereses económicos pueden socavar los valores democráticos y destruir la vida de las personas.

Carvalho, fiel a su ideal, decide enfrentarse a los poderosos, incluso si eso significa poner su propia vida en peligro.

La trama se complica aún más con la aparición de un personaje secundario, un antiguo camarada de Daniel, un ex guerrillero que también ha sido víctima de la corrupción y la violencia política.

Este personaje, con su experiencia y sus conocimientos, se convierte en un aliado fundamental para Carvalho, pero también en una fuente de conflictos y de dudas.

La confrontación final, situada en un entorno rural y aislado, es intensa y dramática, culminando con la revelación de la verdad y con la justicia, aunque imperfecta, que Carvalho logra imponer. Opinión Crítica de Carvalho Vol.

6: Viajero (2013) "Carvalho Vol.

6: Viajero" es, sin duda, una de las mejores entregas de la saga.

Montalban ha logrado construir una historia especialmente compleja y fascinante, que nos transporta a un continente desconocido para el detective, pero que resulta ser sorprendentemente familiar en sus problemas y contradicciones.

La novela es una muestra delirante del talento del autor y del estilo peculiar que lo caracteriza.

La ambientación en Argentina en los años 80 es impecable, y la atmósfera que Montalban consigue crear es opresiva y claustrofóbica, contribuyendo a generar suspense y tensión en la lectura. Carvalho, en esta novela, se presenta como un personaje más maduro y reflexivo, pero sin perder su espíritu irreverente y su sentido del humor.

Su relación con Elena Rodríguez, la joven periodista, es un acierto, ya que aporta una nueva perspectiva a la historia y ayuda a Carvalho a salir de su aislamiento.

La novela no solo es una buena historia de detectives, sino que también es una profunda reflexión sobre la política, la corrupción y la responsabilidad individual.

Montalban, a través de Carvalho, nos invita a cuestionar nuestras propias ideas y valores, y a ser conscientes de los problemas que nos rodean. una lectura obligada para los fans de Carvalho y para aquellos que disfruten de la novela negra con un mensaje social y político. --- ¿Has leído esta novela o alguna otra de la serie de Carvalho? ¿Qué te pareció? ¿Crees que la novela negra puede ser una herramienta para la crítica social y política? Deja tus comentarios y opiniones…