Eso No Estaba En Mi Libro De Historia De La Ciencia
de Eugenio Manuel Fernandez , editorial Guadalmazan
Resumen del libro Eso No Estaba En Mi Libro De Historia De La Ciencia:
Sinopsis de Eso No Estaba En Mi Libro De Historia De La Ciencia:
La crónica de la ciencia acumula muerte por todas partes, y no, los libros de historia no nos la acostumbran a revelar: científicos con prometedoras carreras truncadas por ensayos errados con resultados mortales, hórridos accidentes, homicidos infames, aparte de envenenamientos, ejecuciones de todo tipo, anomalías de la salud exóticas, sobredosis de substancias estupefacientes, mordeduras de ofidios ponzoñosos, caídas por precipicios, suicidios... Eso no se encontraba en mi libro de Historia de la Ciencia es una crónica negra veraz —con unas gotas de humor en el momento en que es necesario—, con los personajes principales de esta especialidad como nunca antes se habían anunciado a los que leen. «Ha bastado un momento para cortarle la cabeza, mas Francia precisará un siglo a fin de que se muestre otra que se le logre equiparar», afirmaba el matemático francés Joseph Louis de Lagrange a su compañero Jean Baptiste J. Delambre tras la ejecución del insigne químico Antoine Lavoisier en la guillotina.
Por su lado, Pierre Curie —Premio Nobel de Física en mil novecientos tres al lado de su mujer Marie— murió arrollado por un turismo de caballos, a los 40 y seis años, y con bastante trabajo por terminar.
El muy célebre Arquímedes de Siracusa murió adulto mayor, mas por una muerte poco natural, pasado a espada por un soldado de roma.
Karen Wetterhan, experto en intoxicaciones por metales pesados, murió en 1997 tras presenciar con uno, el mercurio.
La lista es inacabable.
Muchos son los científicos que tuvieron vidas desgraciadas, que han sufrido accidentes, que han sufrido patologías casuales, que fueron ejecutados, apuñalados, ahorcados, precipitados, o mordidos por algún bicho mortífero; y, a fin de que cunda el pavor mas no caer en depresión si algún lector es científico, hemos salvado —en el último instante— a alguno de estos hombres y mujeres de la Ciencia... mas por poquísimo.